Como decìa el otro dia, los cumpleaños se celebran para conmemorar un año màs de vida o..uno menos?. Cual que sea la respuesta, el dìa se hace interesante para recapitular la agenda de nuestras ilusiones y fieles esperanzas.
En lo particular, me cuesta un poco ser objeto de atenciòn del dìa, sin embargo tomo con agrado las manifestaciones de cariño de los que me rodean. He recibido tantas flores. Flores que me expresan lo vivo de la vida y me transmiten la energìa de seguir en el camino de los senderos afortunados y, de los cuales, doy gracias a Papà Dios, todos los dìas.
Asi que, en esta semana aniversaria he disfrutado del partido de Golf, el sancocho de Chucho, hasta el desayuno dominical, para con ello concluir con la lista de personas que -de una manera u otra- me expresan un cariño sincero y que por cuestiòn de espacio, no caben toodos en mi casita.
Ha sido un espacio de acertada celebraciòn, con ocasiòn a la oportunidad de reinsertanos en el mercado laboral como entes tomadores de decisiones y responsables por la consecuciòn de los objetivos institucionales. Es una celebraciòn por partida doble con lo cual expreso mis en hora buenas para mi Chucho.
En conclusiòn, los ascensos son la respuesta a un trabajo honesto, ardùo y con un alto sentido de responsabilidad que se manifiestan en todas las esferas. En lo particular, van cargado de mucho dinamismo y preciados ideales, aunado a un profundo sentido de compromiso; tal como el dinamismo y las esperanza que hay que tener para subir los 1665 escalones de mi estructura favorita, la Torre Eiffel, que hace unos años tuvimos la dicha de visitar.