25/1/08

La silla donde te esperè.

Pablo y Matilde, siempre han sido mi pareja favorita. En una ocasiòn tuve la oportunidad de visitar su casa y entre un millòn de refugios, encontrè este peculiar espacio donde -quizàs acompañado de un buen Tinto- pudo escribir los versos más tristes alguna noche.
Resaltan los enormes zapatos, recuerdo de que en los 50`s la mayorìa de la poblaciòn chilena era analfabeta y mostrar los artìculos como letrero, era la forma de anunciar por e. Zapateria. Sin embargo, a mi me gustò la silla, me gustan las sillas en general, no por vaga (como se dirà vaga en un lenguaje menos comùn?!?!) sino porque es la mejor forma de esperar. Uno siempre està esperando algo...esperando el fin de semana....esperando la victoria del Licey......esperando el lunes...esperando la Semana Santa...esperando que deje de llover....esperando los cumpleaños....esperando la Navidad, el Año Nuevo....hasta esperando a quien no quedò de llegar.
Por eso y porque recientemente escuchè, que hay que aprender a disfrutar de las cosas en el momento que se tienen y no extrañarlas cuando se van, traigo esta pieza de Alejandro Sanz para ver quien me regala alguna silla.
Regálame la silla,
cansada de la esquina
donde te esperé,
donde siempre te esperaba, amor.
yo puedo regalarte alguna risa
y hacer una canción,
y un pañuelo de lunares,
te regalo tiempo pa` que te lo pongas
y una promesa, si te encuentro un día
te pienso dar de una
todos aquellos besos que te merecías.
Por el puente de la esperanza
buscaba un rinconcito para la risa
pensando que ha valido la pena amarte
pasamos momentos tan flamenquitos
y vimos rinconcitos pa` enamorarse.
La calle del pensamiento
me lleva a aquella orilla,
no sé si te acuerdas
regálame la silla que tiene arte
yo paso por tu puerta casi to` los días
yo paso y tú decides cuando asomarte.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues si morena, estoy feliz por haber nacido alli, donde aun no llega la infelicidad del egoismo, la hipocrecia y en fin la deshumanizacion. Alli naci, alli creci, pero mas que eso alli me forme como ser humano y gracias a ello, hoy se que no hay nada mas importante que eso...que somos seres humanos y como tal debemos considerarnos y cuidarnos los unos a los otros.

Gracias a Dios, a la maestra y a palmiro, que soy de alli, y no de aqui ni de alla, pues alli aprendi a medida crecia, las bondades de Dios y mas que eso su proposito al enviarnos a este mundo. Alli fui llenando mi cerebro,mi corazon y mi espiritu de amor hacia la vida y con ello quiero decir a todo lo que Dios hizo: animales racionales e iracionales, flora, tierra, sol y agua. Nunca como cuando por las tardes me sentaba debajo de un arbol a escribir poesias y miraba hacia el cielo infinito o hasta las colinas lejanas, siempre hermosas, he sido tan feliz. O cuando por ejemplo me levantaba a las cinco de la madrugada y tomaba un bano frio en la mejor tina que he visto: el rio yacica o la chorrera de la golondrina o la majagua, que hermoso aquella no?

Que bueno saber, pero mas que eso sentir que soy de alli y que nunca dejare de amar y admirar, el camino solitario de la loma que tantas veces me vio cortar florecillas silvestres o recoger ajies picantes silvestres y creer que eran uvas, para luego pararme por horas debajo del palo de la gallina, por mandato anciano, en busca de que se quitara el picor. Tampoco olvidare ni dejare de amar, las noches lluviosas y el fango de la tierra que tantas veces se hundió con mi pisada descalza, como lo que soy campesina por naturaleza. Pero no solo eso, tampoco olvidare que a pesar del olor a yerba, a tierra mojada a rocio recien caido,mi padre me sentaba por las noches a leer la historia de el mundo que a poco conozco hoy, pero que entonces solo lo imaginaba. Talves quien sabe olvide todo eso, pero lo que estoy segura es que nunca olvidare que nacimos libres, que somos libres y que moriremos libres, que la dignidad del ser humano es el unico tesoro real y verdadero que por ende nunca debemos permitir que nadie nos la robe, es mas robar es demasiado, que nadie ose en dudar de que ella esta en nosotros como parte intrinsica de nuestra condicion de ser humano. Podre vivir sin el rio, sin los arboles, sin el fango, sin tomasa, sin la escuelita donde aprende a escribir mama y papa, sin las florecillas y aun sin los ajies, pero no podre vivir nunca sin dignidad.
Mami.-